«El que pueda hacer, que haga». Esta famosa frase fue pronunciada por el expresidente José María Aznar en noviembre de 2023, en medio de la lucha contra la investidura de Pedro Sánchez y la ley de amnistía. Hoy, medio año después, la ley de amnistía para los líderes del procés que huyeron de España está en empaque y el nuevo desafío constitucional es la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y la financiación autonómica. Ante esta situación, Aznar ha convocado a todos los españoles a una «movilización» permanente contra «la coalición de ultraizquierda» que gobierna España.
Aznar participó en un coloquio organizado por su fundación para hablar sobre uno de sus temas favoritos: la política exterior. Aunque la conferencia debía tratar sobre China, Aznar no pudo evitar hablar sobre otros temas, como Irán y la legitimidad de Israel para atacar Gaza. Sin embargo, el expresidente también fue cuestionado sobre la situación actual en España, y en particular sobre la independencia del Poder Judicial y la libertad de prensa.
Aznar afirmó que es «posible y deseable» frenar la ofensiva del Gobierno contra la independencia del Poder Judicial y los medios de comunicación, pero que todo depende de la «energía cívica» de los españoles. En este sentido, recordó las palabras de su antepasado, Antonio Maura, quien dijo que «el destino de España está en manos de los españoles, y depende de que dejen de ser espectadores de su propia ruina». Aznar instó a los españoles a pasar de ser espectadores a ser agentes activos para evitar la destrucción del sistema constitucional, del Estado de derecho y de la libertad de prensa.
Sin embargo, Aznar también reconoció que las movilizaciones convocadas por el PP y Vox contra la ley de amnistía han sido insuficientes. El expresidente inclusive llegó a compararlas con un partido de fútbol que se juega un domingo y se olvida el miércoles. Pero la realidad es que estas movilizaciones han sido una muestra del descontento de una parte importante de la sociedad española con la situación actual.
inclusive Esperanza Aguirre, una de las principales colaboradoras de Aznar durante su mandato en el PP, ha participado en las protestas contra la ley de amnistía. Mientras tanto, Aznar ha alentado la cruzada contra esta ley que, según él, busca acabar con el orden constitucional y la continuidad histórica de España.
Aznar también habló sobre el fiscal general del Estado, Alvaro García, a quien acusó de «dañar el Estado de derecho». Y es que, según el expresidente, España está gobernada por una coalición de ultraizquierda que quiere acabar con el sistema constitucional y la libertad de prensa. Por eso, Aznar llamó a la movilización permanente contra el Gobierno.
Mientras tanto, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha mostrado una postura más moderada. En una reciente visita a Bruselas, Feijóo se mostró dispuesto a firmar un conformidad con el PSOE que avance en la independencia judicial. A divergencia de otras ocasiones, el líder del PP no ha acompañado su discurso con una lista de exigencias, sino que se ha limitado a decir que el PP está dispuesto a avanzar en la independencia judicial y que no se dejará chantajear por el Gobierno.
Pero la realidad es que el PP ha tenido posturas oscilantes en materia de independencia judicial y financiación autonómica. Mientras Feijóo defendía una «negociación singular» para Galicia cuando era presidente de la Xunta, en 2012 la entonces líder del PP catalán, Alicia Sánchez
