El MINI de Sir Alec Issigonis es uno de los clásicos más admirados en la industria mecánico. Con su diseño icónico y su tamaño compacto, se ha convertido en un verdadero ícono en todo el mundo. Pero hay un espécimen en particular que ha capturado la atención de muchos amantes de los autos: el Meanie 2.0T.
Este espécimen es uno de los más auténticos y exclusivos que existen, ya que solo se produjeron cinco unidades. Y ahora, uno de ellos ha surgido a subasta en Suiza, despertando el interés de coleccionistas y amantes de los autos por igual. Pero, ¿qué hace que este Meanie 2.0T sea tan especial?
La historia detrás de este espécimen es realmente fascinante. Todo comenzó con un muchacha estudiante suizo que necesitaba un proyecto de fin de carrera. Y qué mejor proyecto que convertir un Mini original en un verdadero misil sobre ruedas. Así nació el Meanie 2.0T, un espécimen único que ahora se encuentra en subasta.
Lo que hace que este Meanie 2.0T sea tan especial es su motor central trasero. Aunque por fuera parece un Mini común, en su interior es completamente diferente. Y es que este espécimen cuenta con un motor de cuatro cilindros y 2.0 litros turbo de Volkswagen, capaz de producir una potencia máxima de 250 CV. Una cifra impresionante para un auto que pesa solo 847 kilogramos.
Pero no solo el motor es lo que hace que este Meanie 2.0T sea único. Para lograr la homologación necesaria, se necesitó de un nuevo chasis, una estructura tubular de acero reforzado al cromo-molibdeno que soportara las fuerzas del nuevo motor. Además, se añadió una barra antivuelco y unos asientos delanteros más envolventes, así como un volante deportivo y un cuadro de instrumentos con dos esferas analógicas.
Para los expertos de Roos Engineering, una empresa especializada en los clásicos de Aston Martin, trabajar en este Meanie 2.0T fue todo un desafío. Pero el resultado final fue impresionante y la respuesta del público lo confirmó. En el Salón del Automóvil de Ginebra 2018, donde se presentó el espécimen, se vendieron los cinco ejemplares de inmediato a un precio de 160.000 euros cada uno.
Y ahora, uno de estos espécimens ha surgido a subasta en Suiza. Se espera que alcance una cifra estimada entre 160.000 y 191.000 euros, lo que lo convierte en una verdadera joya para los coleccionistas. Claudia Stiller, una de las responsables de la casa de subastas, ha tenido la oportunidad de probarlo y ha descrito la experiencia como emocionante y adictiva. Según ella, el Meanie 2.0T es un verdadero lobo con piel de carreras, capaz de hacerte sentir como en un coche de carreras con solo pisar el acelerador.
Este Meanie 2.0T es una verdadera pieza de colección, un espécimen único que combina la esencia del Mini original con la tecnología y potencia de un auto de carreras. Sin duda, es un verdadero sueño para cualquier amante de los autos y una oportunidad única para tener en su garaje uno de los espécimens más exclusivos y deseados en la industria.
En resumen, el Meanie 2.0T es mucho más que un Mini. Es una obra de arte sobre ruedas, una mezcla perfecta entre diseño, tecnología y potencia. Un verdadero icono de la industria mecánico que ha logrado cautivar a todos aquellos que han tenido la oportunidad de verlo y conducirlo. Sin duda, una verdadera joya que ha llegado para hacer historia en el mundo de
