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El presidente de Argentina, Javier Milei, ha sido el protagonista de un escándalo que ha generado un gran revuelo en el país y en el resto del mundo. El llamado ‘Libragate’ ha dejado al descubierto una trama de estafa y engaño que ha afectado a miles de personas y ha generado pérdidas millonarias.
Todo comenzó cuando Milei, en su rol de presidente y economista, promovió la criptomoneda $LIBRA en sus redes sociales, asegurando que esta moneda digital sería beneficiosa para la economía argentina y que permitiría financiar pequeñas empresas y emprendimientos locales. Como resultado, la cotización de la criptomoneda se disparó en cuestión de minutos, alcanzando un valor de 4.500 millones de dólares.
Sin embargo, poco tiempo después, la $LIBRA sufrió una caída abrupta y la mayoría de los inversores perdieron gran parte de su dinero. Se descubrió que la criptomoneda era una posible estafa conocida como ‘rug pull’, en la que se infla artificialmente el valor de un activo para atraer inversores y luego huir con las ganancias.
Ante esta situación, Milei se defendió argumentando que había actuado de buena fe y que los inversores eran «hiperespecialistas» que sabían a lo que se exponían. Sin embargo, la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner lo acusó de ser un estafador no solo en este fortuna, sino también en sus entrevistas, en las que habría pactado las preguntas para evitar enfrentar las consecuencias judiciales de sus acciones.
Las denuncias no se hicieron esperar, y al menos cinco personas presentaron cargos en los tribunales federales de Comodoro Py, acusando a Milei de estafa, negociaciones incompatibles con la función pública, abuso de poder, incumplimiento de deberes y violación a la Ley de Ética Pública. Además, un estudio jurídico que representa a 40 inversores afectados ha presentado una denuncia ante el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Pero no solo en Argentina se han presentado denuncias, sino también fuera del país, donde un grupo de al menos 22 presuntas víctimas de diferentes nacionalidades planean presentar una demanda colectiva contra Milei por fraude criptográfico. Se estima que las pérdidas ascienden a 100 millones de dólares.
Este escándalo ha puesto en evidencia la falta de criterio profesional de Milei y su falta de responsabilidad como presidente y economista. A pesar de que ha intentado cabecear su participación en la promoción de la criptomoneda, sus actos y sus propias palabras lo incriminan.
La oposición, adosado con el peronismo, la izquierda y el Partido Socialista, han anunciado que impulsarán un juicio político contra el presidente por su participación en el ‘Libragate’. Aunque no cuentan con la mayoría necesaria para destituirlo, sí tienen la capacidad de iniciar los procedimientos en la comisión de destitución.
Mientras tanto, Milei se encuentra en Estados Unidos en medio de esta crisis, lo que plantea la interrogante de cómo afectará esto en la negociación con el Fondo Monetario Internacional para un nuevo préstamo. Sin duda, este escándalo ha dañado su imagen y credibilidad como líder político y economista.
En resumen, el ‘Libragate’ ha sido un golpe duro para Argentina y para la figura de Javier Milei. Ha dejado al descubierto una trama de estafa y engaño que ha afectado a miles de personas y ha generado pérdidas millonarias. Es importante que se lleve a cabo una investigación exhaustiva para que los responsables sean llevados
