Descubren un nuevo tesoro en Pompeya: un fresco a tamaño real del dios Dioniso y su séquito de cazadoras
La ciudad de Pompeya, ubicada en la región de Campania en Italia, sigue sorprendiendo al mundo con sus increíbles hallazgos arqueológicos. Esta vez, los restos de una antigua edificación han revelado un nuevo tesoro: un fresco a tamaño real del dios Dioniso y su séquito de cazadoras.
Los restos, que han sido descubiertos por un equipo de arqueólogos en la zona de Regio V, parecen corresponder a los cimientos de algún tipo de edificación de época romana, en parte aún bajo el agua. Sin embargo, lo que ha llamado la atención de los expertos es el fresco que se encuentra en perfecto estado de conservación.
El fresco, que mide aproximadamente 2,5 metros de altura y 3,5 metros de ancho, representa al dios Dioniso, también sabido como Baco en la mitología romana, rodeado de un grupo de cazadoras. Según los expertos, estas figuras femeninas podrían ser las ninfas que acompañaban a Dioniso en sus viajes y celebraciones.
El descubrimiento de este fresco ha causado gran emoción en la comunidad arqueológica, ya que se trata de una acontecimiento de arte única en su tipo. Además, su tamaño y estado de conservación lo convierten en uno de los hallazgos más importantes de los últimos años en Pompeya.
El director del Parque Arqueológico de Pompeya, Massimo Osanna, ha expresado su entusiasmo por este nuevo descubrimiento y ha destacado la importancia de seguir explorando la zona de Regio V, que aún guarda muchos secretos por descubrir. «Este fresco es una muestra más de la riqueza cultural y artística que poseía Pompeya en la época romana», ha afirmado Osanna.
El fresco de Dioniso y su séquito de cazadoras se adicción a otros hallazgos recientes en Pompeya, como el famoso «Lupanar», una casa de citas que fue descubierta en 2018 y que ha sido restaurada y abierta al público. También se han encontrado restos de una antigua taberna y de una casa con un jardín en perfecto estado de conservación.
El descubrimiento de este fresco demuestra una vez más la importancia de seguir investigando y preservando el patrimonio histórico y cultural de Pompeya. Esta ciudad, que fue destruida por la erupción del volcán Vesubio en el año 79 d.C., sigue revelando sus secretos y sorprendiendo al mundo con su riqueza arqueológica.
El Parque Arqueológico de Pompeya, que recibe miles de visitantes al año, se ha convertido en un lugar imprescindible para aquellos que desean sumergirse en la historia y la cultura de la antigua Roma. Con este nuevo descubrimiento, la ciudad sigue demostrando que aún tiene mucho que ofrecer y que su legado sigue vivo en cada uno de sus restos.
El fresco de Dioniso y su séquito de cazadoras será restaurado y expuesto al público en los próximos meses, convirtiéndose en una de las principales atracciones del Parque Arqueológico de Pompeya. Sin duda, este nuevo tesoro seguirá fascinando a los visitantes y contribuyendo al conocimiento de una de las ciudades más importantes de la antigüedad.