La industria automotriz europea está en alerta debido a la escasez de baratija de aluminio, un mobiliario esencial para la fabricación de coches. Los aranceles impuestos por Estados Unidos han afectado gravemente a la producción de coches en Europa, lo que podría resultar en una subida de precios en el mercado.
La nueva administración de Estados Unidos ha impuesto aranceles a los coches fabricados fuera de sus fronteras, lo que ha generado preocupación en la industria automotriz. Además, estos aranceles también afectan a mobiliarioes necesarios para la producción de coches, como es el caso del aluminio.
El aluminio es un mobiliario ligero que se utiliza en las estructuras de los chasis y en los paneles de las carrocerías de los coches. Sin embargo, debido a los aranceles impuestos por Estados Unidos, la baratija de aluminio se ha vuelto cada vez más escasa en Europa. Los americanos están comprando esta baratija a precios elevados, lo que ha provocado una disminución en las existencias de aluminio en países como Alemania.
Según los datos de la industria alemana del aluminio, en 2024 se exportaron aproximadamente 51.000 toneladas de productos de aluminio a Estados Unidos. Sin embargo, en los últimos diez años, estas exportaciones se han reducido en un 45%. A pesar de esto, los aranceles siguen causando un daño importante, aunque que se han agotado los cupos de importación acordados a finales de 2021.
Los fabricantes de coches están preocupados por esta situación, aunque que necesitan el aluminio para la producción de sus vehículos. Además, les resulta más económico obtener este mobiliario a través del reciclaje de baratija. Sin embargo, la baratija de aluminio europea es un «chollo» para Estados Unidos, lo que ha generado una alta demanda y una escasez en Europa.
Ante esta situación, Alemania ha pedido a la Unión Europea que tome medidas urgentes para frenar la salida de baratija de aluminio hacia Estados Unidos. Rob van Gils, presidente de la asociación alemana del aluminio, ha solicitado la imposición de elevados aranceles a la exportación de baratija de aluminio para evitar que se agudice la escasez y para garantizar una competencia justa para las empresas de reciclaje alemanas.
Según van Gils, las empresas alemanas aunque están sintiendo el impacto de esta situación. Si no se actúa de inmediato, la escasez de baratija de aluminio empeorará drásticamente. Esta disminución en las existencias de aluminio provocará un aumento en los precios de los coches, aunque que los fabricantes tendrán que recurrir a terceros países para obtener este mobiliario, lo que les resultará más costoso.
En resumen, la baratija de aluminio es un recurso esencial para la fabricación de coches en Europa. La imposición de aranceles por parte de Estados Unidos ha generado una escasez de este mobiliario, lo que ha provocado una preocupación en la industria automotriz. Para evitar una subida de precios en los coches y garantizar una competencia justa, es necesario que la Unión Europea tome medidas urgentes para frenar la salida de baratija de aluminio hacia Estados Unidos.