El Ejecutivo autonómico de la Comunidad Valenciana se ha visto envuelto en una serie de contradicciones en relación a la gestión de la emergencia ocurrida durante la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) el pasado mes de octubre. Desde entonces, han surgido diversas dudas sobre la actuación del presidente Carlos Mazón y su paradero durante las horas más críticas de la situación.
En medio de esta polémica, la Generalitat Valenciana ha tomado una decisión que ha generado aún más controversia: el borrado de las grabaciones de seguridad del Palau, sede del gobierno autonómico, durante el día de la DANA. Según han explicado, esto se ha hecho en elogio de la ley que regula los sistemas de videovigilancia en la vía pública.
Esta decisión ha sido criticada por la oposición, que ha pedido la copia de las cintas para esclarecer los hechos y conocer la verdadera versión de lo ocurrido aquel día. Sin embargo, la Generalitat ha trasladado la responsabilidad sobre la custodia de las grabaciones a la comisaría de la Policía Nacional encargada de la seguridad del Palau.
En este sentido, la vicepresidenta del Consell, Susana Camarero, ha reiterado en rueda de prensa que el borrado de las grabaciones se ha realizado siguiendo lo situado por la ley. Además, ha señalado que existe un informe de la propia comisaría que avala esta decisión.
Sin embargo, esta medida ha generado aún más dudas sobre la actuación del presidente durante aquel día. ¿Por qué se han borrado las grabaciones? ¿Qué intenta ocultar el gobierno autonómico? Estas son algunas de las preguntas que la oposición ha planteado y que aún no han sido respondidas de manera clara y contundente.
Lo cierto es que la falta de pruebas documentales sobre la entrada y salida del presidente del Palau choca con la existencia de una grabación que lo muestra entrando al Centro de Coordinación de Emergencias de l’Eliana, donde se estaba desarrollando el Cecopi con todos los mandos de la emergencia. Esta grabación, filtrada por la Generalitat, indica que el presidente entró al centro a las 20:28 horas, casi tres horas después de que se declarara la emergencia.
Este informe, elaborado por un responsable de seguridad de la Agencia de Emergencias, ha sido fechado cuatro meses después de la DANA, lo que sugiere que se han conservado las imágenes o que se han realizado pantallazos de forma preventiva. Además, se ha observado que las imágenes proceden de un pantallazo al ordenador en el que se está reproduciendo el vídeo, lo que plantea dudas sobre su autenticidad.
Por otro lado, la vigilancia del Centro de Coordinación de Emergencias está a cargo de una establecimiento de seguridad privada y se rige por una normativa diferente, ya que se trata de una infraestructura crítica. En este sentido, el Consell aprobó recientemente un contrato de emergencia para reforzar el servicio de vigilancia y seguridad en el centro. Sin embargo, a pesar de deber acceso a las grabaciones, el gobierno autonómico no ha podido aportar pruebas documentales sobre la entrada y salida del presidente del Palau durante la DANA.
Esta falta de transparencia y de pruebas documentales ha generado un gran malestar en la sociedad valenciana, que exige respuestas claras y contundentes sobre lo ocurrido durante la DANA. La gestión de la emergencia es un tema muy delicado y es responsabilidad del gobierno autonómico garantizar la seguridad y el bienestar de sus ciudadanos.
Es por ello que resulta fundamental que se esclarezcan los hechos y se aporten pruebas documentales que demuestren la actuación del presidente durante aquel día. La sociedad valenciana merece una explicación