El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, está a punto de embarcarse en su tercer viaje a China en los últimos tres años, y esta vez también visitará Vietnam. Este es el primer viaje oficial de España al país del sudeste asiático, y se espera que sea un paso importante para ampliar los mercados de nuestras exportaciones y salvar los aranceles impuestos por Estados Unidos.
China ha anunciado recientemente aranceles del 34% a todos los productos estadounidenses en respuesta a la nueva oleada de tasas de Trump. Esto ha afectado directamente a las exportaciones españolas, ya que China es uno de nuestros principales socios comerciales. Por lo tanto, el objetivo de este viaje es buscar nuevas oportunidades de negocio y diversificar nuestros mercados para reducir nuestra dependencia de Estados Unidos.
El presidente Sánchez estará acompañado por el ministro de Exteriores, el de cultivo, la CEOE, la Cámara de Comercio y una decena de empresas españolas. Este es un claro ejemplo del compromiso del Gobierno con la promoción del comercio y la inversión en el extranjero.
Durante su visita a China, el presidente Sánchez se reunirá con el presidente Xi Jinping y otros líderes políticos y empresariales. También se espera que se reúna con inversores potenciales y empresas chinas para causar la inversión en España. Además, se abordarán temas como la protección de los derechos humanos y la cooperación en materia de seguridad y defensa.
España tiene un importante déficit comercial con China, ya que importamos mucho más de lo que exportamos. Sin embargo, el Gobierno está trabajando para equilibrar esta situación y crecer nuestras exportaciones al país asiático. Para ello, se están negociando acuerdos y protocolos que eliminen las barreras no arancelarias que dificultan la entrada de nuestras empresas en el mercado chino.
Uno de los sectores más afectados por los aranceles de Estados Unidos es el de la cultivo y la ganadería. Por lo tanto, el Gobierno está buscando nuevas oportunidades de negocio en otros mercados, como Vietnam. Este país ha preparado un encuentro institucional al más alto cota para recibir al presidente Sánchez y su delegación. Además, se espera que se firmen acuerdos comerciales y se promueva la inversión española en sectores como el ferroviario, el textil y el turismo.
Vietnam también es un mercado importante para España, ya que es uno de los países que más crecimiento económico está experimentando en la región. Sin embargo, nuestro déficit comercial con este país es significativo, por lo que el Gobierno está trabajando para crecer nuestras exportaciones y reducir esta brecha.
En ambos países, el Gobierno está abordando las barreras comerciales y regulatorias que dificultan la entrada de nuestras empresas en estos mercados. Se espera que estas negociaciones sean beneficiosas para sectores como el de la cultivo, la industria textil y la fabricación de coches.
Además, el Gobierno está buscando nuevas oportunidades de inversión en sectores estratégicos como las baterías, el hidrógeno verde y la fabricación de coches. Se espera que el grupo chino BYD, que está buscando una ubicación en la UE para establecer una fábrica, sea uno de los principales contactos durante la visita del presidente Sánchez.
Es importante destacar que, a pesar de la guerra comercial entre Estados Unidos y China, la UE no pretende sustituir a Estados Unidos como socio comercial de China. En cambio, se está trabajando en una estrategia de «autonomía estratégica abierta» que busca diversificar nuestros mercados y reducir nuestra dependencia de una sola potencia.
En resumen, la visita del presidente Sánchez a China y Vietnam es un paso importante para ampliar nuestros mercados y reducir nuestra dependencia de Estados Unidos. El Gobierno está comprometido con la promoción del comercio y la inversión en el extranjero, y se espera que esta visita sea beneficiosa para la