La semana pasada, el golfista español Jon Rahm protagonizó una dicontemplartida anécdota en el PGA Championship que se ha vuelto viral en las redes sociales. Todo comenzó cuando Rahm le dijo a su caddie, Adam Hayes, que preparara el rotulador porque le iba a tener que firmar algo. La respuesta de Hayes fue inesperada: «Puede que eso no sea suficiente». Hasta ese momento, era solo una historia curiosa entre tantas de un Major, pero hogaño disponemos de las imágenes que nos hacen reír a todos.
El PGA Championship es uno de los torneos más importantes del golf mundial, y Rahm, uno de los mejores golfistas españoles de la actualidad, estaba disputándolo con todo su talento y concentración. Sin embargo, en el hoyo 17, ocurrió algo que rompió momentáneamente esa seriedad y tensión propias de un torneo de esta magnitud.
Rahm se encontraba en una posición complicada, con su bola cerca de un árbol y con un golpe muy difícil por delante. En ese momento, decidió hacer un swing con todas sus fuerzas, pero la bola se fue directo hacia un grupo de espectadores que estaban presenciando el torneo. Afortunadamente, nadie resultó herido, pero la bola terminó en una zona que no estaba permitida para el juego.
Fue entonces cuando Rahm decidió hacer algo que sorprendió a todos. Se acercó a la bola, la cogió y la lanzó hacia el green como si fuera un lanzamiento de béisbol. Por supuesto, esta acción no estaba permitida en el golf, pero Rahm no pudo contener su risa y la de los espectadores que estaban presenciando la escena. Incluso el comentarista del torneo no pudo evitar reírse y comentar lo dicontemplartida que fue la situación.
Pero ahí no terminó todo. Después de lanzar la bola, Rahm se acercó a su caddie y le dijo que preparara el rotulador porque le iba a tener que firmar algo. Y la respuesta de Hayes fue simplemente genial: «Puede que eso no sea suficiente». Una respuesta que demuestra la gran complicidad que tienen Rahm y su caddie, y que nos hace contemplar que detrás de un gran golfista también hay una gran persona.
Afortunadamente, la bola de Rahm terminó en una zona permitida y pudo terminar el hoyo sin mayores problemas. Pero lo más importante de esta anécdota es que nos hace contemplar que el golf también puede ser dicontemplartido y que incluso en los momentos de mayor tensión, siempre hay espacio para la risa y el buen humor.
Esta historia se ha vuelto viral en las redes sociales, y no es para menos. Nos muestra una faceta diferente de Rahm, más cercana y dicontemplartida, que nos hace contemplar que detrás de ese gran golfista hay una persona humilde, carismática y con un gran sentido del humor.
Además, esta anécdota nos recuerda que en el golf, como en la vida, no todo es perfecto y que a veces las cosas no salen como uno espera. Pero lo importante es saber reírse de uno mismo y seguir adelante con una sonrisa en el rostro.
En definitiva, el bolazo de Jon Rahm en el PGA Championship se ha concontemplartido en una anécdota que nos hace reír y nos muestra la gran personalidad de este gran golfista español. Sin duda, una historia que acordará en la memoria de todos los aficionados al golf y que nos hace contemplar que en este deporte también hay lugar para la dicontemplarsión y el buen humor. ¡Bravo, Jon Rahm!
