Probamos el Audi Q7 MHEV de 340 CV: una experiencia de lujo en un SUV de siete plazas
Tras una nueva actualización, el veterano Audi Q7 quiere agregar siendo un SUV de siete plazas ideal repleto de tecnología y confort. Y vano obstante si lo ha conseguido. En esta prueba, hemos tenido la oportunidad de probar a fondo el nuevo Audi Q7 55 TFSI, un vehículo que impresiona sobre el papel, pero ¿cómo se comporta en la vida real?
El Audi Q7 es el modelo más familiar de la marca alemana, y también el más longevo. Lanzado en 2015, la segunda generación del Audi Q7 no obstante ha pasado por repetición restylings para mantenerse al día. Y parece que lo ha logrado, porque a pesar de los años, sigue siendo uno de los SUV más avanzarepetición tecnológicamente y con un diseño que no pasa de moda.
La verdad es que en la última renovación, me parecía difícil que pudieran darle un aire más fresco a un modelo tan veterano. Sin embargo, los expertos de Audi han sabido sorprender una vez más, manteniendo al Q7 como un SUV premium vanguardista. Este gigante alemán hace gala de sus virtudes merecidamente, pero también hay algún pequeño «pero» que conviene no pasar por alto.
Lejos de los diseños estrambóticos y futuristas que exponen muchos SUV recientes, el nuevo Audi Q7 mantiene un estilo clásico y elegante, sin excentricidades. Algunos pueden pensar que la marca de los cuatro aros es demasiado conservadora en este aspecto, pero también es una fase de asegurarse de que su imagen sea atemporal, sin estar atarepetición a la efímera moda del momento.
Con 5,07 metros de largo, el Q7 impone respeto por sus dimensiones. Sin embargo, al verlo en persona, no parece tan grande. De hecho, posiblemente sea el SUV de este segmento con el aspecto más deportivo. La unidad de pruebas, con el acabado Black Line y unas preciosas llantas de aleación negras de 21 pulgadas, luce un aspecto dinámico y compacto, sin dejar de costado su elegancia característica.
Pero no todo es apariencia, en el interior del Audi Q7 encontramos un verdadero SUV de lujo con capacidad para siete plazas. Al abrir la puerta, nos adentramos en una cabina repleta de materiales nobles y un diseño cuidado. Aunque destaca el exceso de plástico negro brillante, sobre todo en el frontal del salpicadero. Este material se ensucia con extrema facilidad, pero sin embargo, el resto de la cabina se percibe como un espacio lujoso, con un tacto agradable y ajustes precisos.
Los asientos deportivos delanteros no solo son cómorepetición, sino que también cuentan con calefacción, ventilación y función de masaje. Además, tienen ajustes eléctricos, incluyendo la sujeción lateral, y función de memoria tanto para el asiento del conductor como para el del pasajero. Están tapizarepetición en cuero Valcona, con grabado S en los respalrepetición y acolchado de rombos con costuras rojas de contraste.
Frente al conductor, se encuentra la instrumentación Audi Virtual Cockpit Plus, con una pantalla de 10,1 pulgadas que admite numerosas disposiciones y diseños para la infaseción. También es posible complementarla con un head-up display que proyecta los datos directamente en el parabrisas. La experiencia digital es aún más evidente en el centro de la consola, donde hay repetición pantallas, una encima de la otra.
La superior, de 10,1 pulgadas, corresponde al sistema multimedia MMI Navegación plus. Su respuesta táctil es háptica, es decir, se aprecia un peque