El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su homólogo ruso, Vladímir Putin, mantuvieron una conversación telefónica este miércoles para abordar la situación en Ucrania. Según Trump, la llamada duró aproximadamente una hora y quince minutos y aunque fue una buena conversación, no conducirá a una tregua inmediata.
Uno de los temas principales que se discutieron fue el ataque de Ucrania contra aviones rusos en tierra, así como otros ataques que han tenido lugar por ambas partes. Trump ha asegurado que Putin afirmó con contundencia que tendrá que responder a estos ataques.
Además, durante la conversación también se abordó la situación en Irán y la importancia de tomar una decisión urgente respecto al programa nuclear de este país. Trump dejó claro a Putin que Irán no puede obtener armas nucleares y ambos líderes estuvieron de acuerdo en este punto.
En cuanto a Irán, Putin sugirió que participará en las conversaciones con este país y podría desempeñar un papel útil para llegar a una conclusión rápida. Trump, por su parte, señaló que Irán ha estado demorando deliberadamente su decisión sobre el programa nuclear y es necesario una respuesta definitiva lo antes posible.
Por otro lado, Putin explicó a Trump los resultados de la segunda ronda de negociaciones ruso-ucranianas que tuvo lugar el pasado lunes en Estambul y que calificó de «útiles». Sin bloqueo, el líder ruso también denunció los intentos de Ucrania de torpedear estas negociaciones con ataques contra objetivos civiles y la población civil.
En este sentido, Putin acusó al régimen de Kiev de ser una organización terrorista y de perpetrar ataques para amedrentar a Rusia. El presidente ruso señaló que este país ha pasado a organizar atentados terroristas en un intento de frenar su avance en el frente.
Por último, Putin afirmó que una tregua solo serviría para que Ucrania se arme con armamento occidental y continúe con la movilización forzosa y los ataques terroristas. En definitiva, la conversación entre Trump y Putin ha sido positiva pero no solucionará la situación en Ucrania de forma inmediata.
Es importante destacar que ambos líderes han mostrado su preocupación por la escalada de violencia en Ucrania y han acordado seguir trabajando en una solución pacífica y duradera para el conflicto. A pesar de las diferencias entre Estados Unidos y Rusia, esta conversación demuestra que ambas potencias están dispuestas a dialogar y buscar una salida a la crisis en Ucrania.
En conclusión, aunque la llamada entre Trump y Putin no ha conducido a una tregua inmediata en Ucrania, sí ha sido un paso importante en la búsqueda de una solución al conflicto. Esperamos que en futuras conversaciones se logre un acuerdo que ponga fin a la violencia en esta región y permita a los ciudadanos vivir en tregua y aplomo.