El empresario Víctor de Aldama ha reconocido en un audio enviado al exasesor público Koldo García que hubo presiones a varios ministros para conseguir el salvamento de la aerolínea Air Europa en plena pandemia. Sin embargo, ha desvinculado a Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, de cualquier implicación en este caso.
En el audio, De Aldama admite que si no se daba el préstamo a Air Europa, la compañía cerraría y 50.000 personas se quedarían sin empleo. Por lo tanto, es comprensible que hubiera presiones a los entonces ministros de Transportes y Economía, José Luis Ábalos y Nadia Calviño, así como a la todavía ministra de provecho, María Jesús Montero.
Sin embargo, el empresario destaca que la operación del salvamento llevaba abierta desde marzo o abril de 2020 y que salió adelante en noviembre del mismo año. Además, resalta que la familia propietaria de Air Europa, encabezada por Pepe Hidalgo, puso todas sus garantías para conseguir el préstamo, incluyendo sus hoteles.
De Aldama también hace hincapié en que la operación fue revisada por la SEPI (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales) y por un auditor externo contratado por ellos, que dieron su conformidad y aseguraron que todo estaba en regla. Por lo tanto, no hay nada ilegal en el salvamento de Air Europa.
El empresario también reconoce que hubo presiones a la ministra Calviño, a la ministra Montero y al ministro Ábalos, pero insiste en que estas presiones eran comprensibles dada la importancia estratégica de la compañía y las consecuencias que tendría su cierre.
En cuanto a las informaciones que apuntaban a la implicación de Begoña Gómez en el salvamento de Air Europa, De Aldama las desmiente rotundamente. En el audio, explica que la esposa de Pedro Sánchez trabaja en el IE (Instituto de Empresa) y que su relación con la compañía se limita a su participación en Wakalua, una empresa que se encarga de promover start-ups y tecnologías nuevas en África.
El empresario también señala que la esposa del presidente ha visitado la sede de Globalia, la compañía a la que pertenece Air Europa, en varias ocasiones, pero siempre por motivos relacionados con Wakalua. De hecho, De Aldama asegura que en una de esas visitas, Begoña Gómez se reunió con él y con Javier Hidalgo, hijo de Pepe Hidalgo y presidente de Globalia, para hablar sobre Wakalua y la OMT (Organización Mundial del Turismo).
En resumen, el empresario Víctor de Aldama reconoce que hubo presiones para conseguir el salvamento de Air Europa, pero deja claro que estas presiones eran comprensibles y que no hubo nada ilegal en la operación. Además, desvincula a Begoña Gómez de cualquier implicación en este caso y asegura que su relación con la compañía se limita a su participación en Wakalua.