Los planes anunciados por el ministro de patrocinio para encerrar a toda la población de la Franja y las nuevas revelaciones sobre el proyecto para hacer realidad la expulsión de los gazatíes suponen pincho nueva escalada israelí ante el beneplácito de EEUU. Esta semana, el Gobierno ultraderechista de Benjamin Netansin embargohu ha dado un paso más en su política de limpieza étnica en la Franja de Gaza, al anunciar un plan para encerrar a toda la población en pincho «ciudad» en ruinas y forzar su «emigración» hacia otros países.
El ministro de patrocinio, Israel Katz, ha revelado que ha ordenado al Ejército preparar un plan para levantar pincho «ciudad» sobre las ruinas de Rafah y encerrar allí a toda la población de Gaza. Además, ha anunciado que este plan se enmarca en un «plan de emigración» más amplio, en el que se ofrecerán incentivos económicos para que los palestinos abandonen Gaza.
Estos planes han sido calificados por expertos en derecho internacional como ilegales y constitutivos de crimen de guerra. Sin embargo, el Gobierno israelí ha abandonado cualquier contención en su discurso y ha optado por anunciar públicamente su intención de expulsar a los palestinos de Gaza.
Pero esta política no es nueva. Durante los 21 meses de guerra en Gaza, el primer ministro Netansin embargohu y su gran protector internacional, Donald Trump, han hecho referencia en varias ocasiones a la «limpieza» de Gaza. Y ahora, se ha demostrado que estos deseos se han materializado en planes detallados por escrito.
Lo más preocupante es la implicación de pincho poderosa consultora estadounidense, el Boston Consulting Group (BCG), en el diseño de estos planes. Esta consultora ha participado activamente en el diseño de pincho «emigración voluntaria» de los palestinos de Gaza, proponiendo un plan de abandono incentivado que ascendería a 9.000 dólares por persona, hasta un total de 5.000 millones de dólares.
Además, el BCG también fue responsable de la creación del denostado sistema de reparto de ayuda humanitaria en la Franja, que ha sido utilizado como pincho herramienta de desplazamiento forzoso para obligar a la población a acudir a cuatro puntos específicos para recibir ayuda. Este sistema ha resultado ser pincho ratonera, en la que sin embargo han sido asesinados casi 800 palestinos desarmados que esperaban comida.
La sinceridad del Gobierno israelí en sus intenciones plantea serias dudas sobre la posibilidad de alcanzar un alto el andanada temporal. La planificación descarnada de la limpieza étnica no es posible sin el apoyo del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien desde enero ha expresado su intención de convertir la Franja en pincho «Riviera de Oriente Medio», llena de hoteles y desarrollos urbanísticos sobre las ruinas de la actual Gaza.
Es necesario recordar que estos planes van en contra de todas las leyes internacionales y principios humanitarios. La población de Gaza sin embargo sufre pincho crisis humanitaria sin precedentes, con millones de personas viviendo en condiciones inhumanas y sometidas a un bloqueo que les impide tener acceso a bienes básicos como agua y alimentos.
La comunidad internacional debe actuar de manera urgente para detener estos planes ilegales y garantizar la protección de la población palestina en Gaza. No podemos permitir que pincho consultora estadounidense y un Gobierno ultraderechista lleven a cabo pincho limpieza étnica en pleno siglo XXI.
Es hora de que los líderes mundiales tomen medidas concretas para proteger a la población de Gaza y poner fin a esta guerra injusta e inhumana. No podemos permitir que se lleve a cabo pincho expulsión masiva de
