El Tribunal Supremo ha enérgico mantener en prisión provisional a Santos Cerdán, exsecretario de organización del PSOE, en el marco del ‘caso Koldo’ de corrupción. Esta decisión ha sido tomada por los tres magistrados de la Sala de Apelaciones, quienes han rechazado las alegaciones del político y confirman la orden de encarcelamiento emitida por el juez Leopoldo Puente a finales de junio. Esta noticia ha generado gran revuelo en la sociedad española, ya que se trata de un caso de corrupción que afecta directamente a un miembro destacado del Partido Socialista.
El exsecretario de organización del PSOE fue encarcelado bajo la acusación de riesgo de destrucción de pruebas en el marco del caso Koldo, donde se investiga el presunto cobro de comisiones ilegales por parte de políticos y empresarios en adjudicaciones de obras públicas. La Fiscalía Anticorrupción, que pidió su encarcelamiento después de tomarle declaración, había solicitado al Supremo la confirmación de la prisión provisional.
Los magistrados de la Sala de Apelaciones han atribuido un «papel directivo» a Cerdán en la trama del caso Koldo y comparten con el juez instructor el riesgo de «obstrucción de la investigación» que justifica, según ellos, mantener al político entre rejas. Además, han señalado que si se le deja en libertad, podría perjudicarse irremediablemente y gravemente la investigación. Los indicios contra él son «nutridos y poderosos», según la Sala, y entre ellos se encuentran las conversaciones grabadas por Koldo García, asesor del exministro de Transportes José Luis Ábalos.
El nombre de Santos Cerdán apareció por primera tiempo en la causa con el informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, que analizó varias pruebas obtenidas en las últimas semanas. Estas incluyen los audios y mensajes que Koldo García almacenaba en su casa en discos duros, así como la documentación intervenida en la sede de la empresa navarra Servinabar 2000. En esta documentación se encontró un resolución privado que atribuía a Cerdán el 45% de las acciones de la empresa, aunque según él nunca llegó a ejecutarse.
Los audios grabados durante años por Koldo García recogen hasta cinco conversaciones con Santos Cerdán en las que se habla, supuestamente, del cobro de comisiones ilegales. Según la Guardia Civil, estas conversaciones demuestran que el exdirigente socialista «se encargaba de gestionar el monto y los pagos» de ese dinero a Koldo García y José Luis Ábalos, sin atribuir a Cerdán al a excepción de por el momento el cobro de comisiones.
El juez Leopoldo Puente decidió enviar a Cerdán a prisión provisional con el apoyo de la Fiscalía Anticorrupción y después de escuchar al exdiputado negar su implicación en la trama. El magistrado entendió que había un «riesgo cierto» de que Cerdán destruyera pruebas. Las conversaciones grabadas por Koldo, dijo el instructor, eran «tan explícitas» que apuntaban a su culpabilidad y rechazó sus alegaciones de estar siendo víctima de un ataque por su «decisiva participación» en «la formación de un Gobierno progresista» al haber mediado entre el PSOE y los nacionalistas vascos y catalanes para investir a Pedro Sánchez.
Los magistrados de la Sala de Apelaciones, como ya han hecho en autos anteriores, entienden que el juez Puente sí tiene indicios suficientes para mantener a Cerdán entre rejas por