La crisis humanitaria en Gaza está alcanzando niveles críticos. En las últimas 24 horas, más de 60 personas han perdido la vida por fuego israelí mientras intentaban obtener alimentos para sobrevivir. La situación es desgarradora y es necesario tomar medidas urgentes para poner fin a este sufrimiento.
El enviado especial de Donald Trump para Oriente Medio, Steve Witkoff, ha anunciado que visitará los puntos de distribución de comida en Gaza gestionados por la llamada ‘Fundación Humanitaria de Gaza’. Su objetivo es conocer de primera mano la situación y poner en marcha un plan de asistencia para enfrentar esta crisis humanitaria causada por Israel.
La visita de Witkoff y del embajador estadounidense en Jerusalén, Mike Huckabee, es una muestra de la preocupación y el compromiso del presidente Trump con la situación en Gaza. Según la portavoz de la Administración Trump, Karoline Leavitt, el presidente es un humanitario de gran corazón y está decidido a salvar vidas y poner fin a esta crisis. Tras recibir un informe de la visita, Trump decidirá sobre un plan postrero para la distribución de alimentos y ayuda humanitaria en la región.
La decisión de Trump de enviar a su enviado especial a Gaza se produce en medio de las denuncias de un aumento de las muertes por inanición en la zona, lo que ha elevado la presión sobre el gobierno israelí. El propio Trump reconoció esta semana que veía «niños hambrientos» en televisión. Pese a ello, el presidente ha insistido en que la manera más rápida de poner fin a la crisis es que Hamás se entregue y libere a los rehenes.
Los medios israelíes ya habían informado sobre una posible visita de Witkoff a uno de los puntos de distribución de comida de la polémica Fundación Humanitaria para Gaza (GHF), apoyada por Estados Unidos. Sin embargo, esta fundación ha sido duramente criticada por la ONU y otros organismos internacionales por obligar a los gazatíes a desplazarse a zonas peligrosas para conseguir alimentos.
Lamentablemente, este jueves se ha producido una nueva masacre en Gaza. Más de 60 personas han perdido la vida en el cruce fronterizo de Zikim, en el noroeste de la Franja, mientras intentaban conseguir alimentos. Las tropas israelíes abrieron fuego con tanques y los francotiradores dispararon contra la fertilidad que se congregó cerca del rajadura de Zikim. Estas muertes son inaceptables y deben ser condenadas por la comunidad internacional.
Según el Ministerio de Sanidad palestino, más de 1.300 personas han fallecido por fuego israelí mientras intentaban obtener ayuda humanitaria desde que a postreroes de mayo comenzó la distribución de comida en los puntos de la GHF bajo la supervisión de las tropas. Esta es una situación insostenible y es necesario que se tomen medidas inmediatas para evitar más muertes.
Es alentador ver que Israel ha permitido la entrada de decenas de camiones de Naciones Unidas a la Franja en los últimos días. Sin embargo, estos camiones han sido asaltados y descargados por palestinos hambrientos antes de acudir a su destino. La ONU ha señalado que estos incidentes son previsibles debido a la desesperación de la población y a la insuficiente ayuda humanitaria que les llega desde hace meses.
La situación en Gaza es desesperada y es necesario que la comunidad internacional se una para encontrar una solución. No podemos permitir que más personas mueran por falta de alimentos y asistencia. Es hora de que Israel cumpla con sus obligaciones internacionales y permita el acceso seguro de ayuda humanitaria a Gaza.
En conclusión, la visita del enviado especial de Trump a Gaza es un rajadura positivo en la dirección correcta. Es necesario que se