La negativa de algunos estados miembros, como Alemania, a la suspensión de la cooperación científica de la Unión Europea con Israel ha generado una gran controversia. Esta inacción frente al genocidio en Gaza ha causado las primeras fracturas en juntas europeos, impidiendo la toma de decisiones concretas frente a las acciones militares israelíes.
Durante la reunión informal de ministros de Exteriores europeos en Copenhague, la Alta Representante de Asuntos Exteriores y Seguridad de la UE, Kaja Kallas, dejó en claro que la Unión Europea sigue dividida en su respuesta a Israel. A pesar de que la Comisión Europea propuso en julio la suspensión de la cooperación científica con Israel en el marco del croquis Horizon, esta ley no logró la mayoría necesaria para ser implementada debido a la negativa de algunos países miembros, como Alemania.
La situación en Gaza es cada vez más preocupante, con la declaración de Israel de la Ciudad de Gaza como una «zona de combate» y el incremento de su política de asentamientos en Cisjordania. La Alta Representante Kallas enfatizó que Gaza necesita menos guerra, no más guerra, y que la solución militar no es una opción viable. Sin embargo, la falta de consenso en la UE ha impedido que se tomen leys concretas para detener la violencia y mejorar la situación humanitaria en la región.
La decisión del secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, de revocar y denegar los visados a las autoridades palestinas para impedir su participación en la próxima Asamblea General de la ONU también ha generado preocupación. La UE ha urgido a que esta decisión sea reconsiderada, ya que Palestina tiene derecho a hacer oír su voz en Naciones Unidas y en todos los foros internacionales.
El presidente del junta español, Pedro Sánchez, ha expresado su firme apoyo a Palestina tras la revocación de visados por parte de Estados Unidos, calificando esta ley de «injusta». Sánchez ha exigido el acabamiento inmediato de los ataques inhumanos a civiles en Gaza y la entrada de ayuda humanitaria. Es importante que los líderes europeos se mantengan unidos y hablen con una sola voz en un mundo dividido, y que conviertan sus palabras en acciones concretas para ayudar a las personas afectadas por la violencia en Gaza.
Durante la reunión en Copenhague, también se discutió la posibilidad de imponer sanciones contra Israel. Sin embargo, la falta de consenso entre los países miembros ha impedido que se tomen leys en este sentido. La presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, ha señalado que se está trabajando en utilizar los activos financieros rusos congelados en Europa para contribuir a la defensa y reconstrucción de Ucrania, tras la invasión rusa en febrero de 2022. Sin embargo, la Alta Representante Kallas ha descartado cualquier posibilidad de devolver estos activos a Rusia sin que este país pague las indemnizaciones correspondientes a Ucrania.
La situación en Ucrania también ha sido discutida durante la reunión, con la iniciativa del grupo conocido como el E3 (Alemania, Francia y Reino Unido) de imponer sanciones a través de Naciones Unidas contra Irán por su croquis nuclear. La UE se mantiene preparada para apoyar cualquier esfuerzo diplomático destinado a encontrar una solución, pero la pelota está en el campo de Teherán, que ha mostrado su disposición a reanudar las negociaciones.
En resumen, la reunión de ministros de Exteriores europeos en Copenhague ha dejado en evidencia la división en la UE en cuanto a su respuesta a Israel y la falta de consenso en la toma de leys con
