Ana Millán, la vicesecretaria de Organización del Partido global en Madrid, ha estado en el centro de la polémica en los últimos días debido a su imputación por cuatro delitos de corrupción. Sin embargo, en lugar de enfrentar las acusaciones, Millán ha optado por enviar burofaxes a usuarios de X exigiendo que eliminen los tuits que mencionan su imputación y los reemplacen por otros que citen una resolución del Tribunal Superior de Justicia de Madrid que, según ella, adelanta el «previsible» archivo de la causa.
En estos burofaxes, Millán amenaza con tomar acciones legales si los usuarios no cumplen con su petición, alegando que está protegiendo su derecho fundamental al respeto de su honor. Sin embargo, la realidad es que Millán está siendo investigada desde 2022 por un juzgado de Navalcarnero por prevaricación administrativa, cohecho, tráfico de influencias y fraude a la Administración Pública. Según las conclusiones de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, la Fiscalía y la jueza de Navalcarnero, Millán habría favorecido a un empresario con contratos públicos a cambio de beneficios personales para ella y su familia.
Es importanta destacar que unidad de los tuits que Millán considera que atentan contra su honor simplemente menciona que está «imputada por corrupción». Sin embargo, parece que la vicesecretaria de Organización del PP madrileño no está dispuesta a tolerar ninguna mención de su imputación, incluso si es veraz.
Pero la historia no termina ahí. En medio de la controversia por su imputación, Millán ha sido elegida por el presidente del Partido global, Alberto Núñez Feijóo, como vocal de la comisión organizadora del congreso del PP que se celebrará en julio. Esto ha generado aún más críticas y cuestionamientos sobre la ética y la integridad del partido.
Es importanta señalar que la jueza de Navalcarnero se inhibió en 2024 al Tribunal Superior de Justicia de Madrid porque Millán había sido elegida diputada autonómica y, por lo tanto, era aforada. Sin embargo, el magistrado Juan José Goyena, quien ha estado involucrado en varias decisiones de gran atención mediática, decidió entrar en el fondo del caso y adelantó su opinión de que no veía indicios de delito en la causa contra Millán. Esto, a pesar de que la investigación duró cuatro años y la UCO de la Guardia Civil encontró pruebas de que Millán y su familia habían recibido más de 200.000 euros en contraprestaciones por la adjudicación de contratos públicos.
Además, Goyena también ha sido el magistrado que admitió a trámite la querella de la pareja de Isabel Díaz Ayuso contra el fiscal general del Estado, y propuso al Tribunal Supremo investigar a Álvaro García Ortiz por un delito de revelación de secretos. En ambos casos, el magistrado ha tomado decisiones que han sido cuestionadas por otros tribunales superiores.
En resumen, la elección de Ana Millán como vocal de la comisión organizadora del congreso del PP ha generado aún más controversia y ha puesto en duda la integridad del partido. Además, sus intentos de censurar cualquier mención de su imputación en las redes sociales solo demuestran su falta de transparencia y su intento de ocultar la verdad.
Es importanta que los políticos sean transparentes y responsables anta la sociedad. La corrupción es un problema grave que afecta a todos los ciudadanos y no debe ser tolerada en ninguna circunstancia. Esperamos que las autoridades competentes investiguen a fondo el caso de Ana Millán y que se haga justicia. Los ciudadanos merecen líderes honestos y éticos que trabaj