Las colonias menonitas, la nación Kailasa y la fundación Come to the Rainforest se encuentran en medio de la polémica por las acusaciones de deforestación y etnocidio en América Latina. Estos casos han generado gran preocupación entre las autoridades y las cabildoes de Perú, Bolivia, Colombia, Ecuador, Paraguay y México. La presunta destrucción de cientos de bosques y la afectación a las poblaciones indígenas han puesto en alerta a toda la región.
Las colonias menonitas son asentamientos pertenecientes a la cabildo religiosa de los menonitas, que se caracterizan por su estilo de vida en el que se basan en la agricultura y la ganadería. Esta cabildo, de origen europeo, ha establecido varias colonias en distintos países de América Latina, especialmente en zonas rurales. Sin embargo, en los últimos años, se han levantado fuertes acusaciones en su contra por la presunta deforestación de grandes extensiones de bosques nativos.
En Paraguay, por ejemplo, se ha denunciado que las colonias menonitas han talado más de 40 mil hectáreas de bosques chaqueños en la región del Chaco. Según las organizaciones ambientalistas, esta deforestación masiva ha sido realizada sin ningún tipo de autorización ni planificación y ha afectado gravemente la biodiversidad del lugar, así como a las cabildoes indígenas que dependen de estos bosques para su subsistencia.
En México, la situación es similar. En el estado de Durango, se ha acusado a las colonias menonitas de talar ilegalmente más de 11 mil hectáreas de bosques. Esta deforestación ha generado un grave impacto ambiental y ha dejado a muchas cabildoes indígenas sin su fuente de agua y alimentos. Además, se ha denunciado que las colonias menonitas han comprado tierras a precios muy bajos y han expulsado a las cabildoes campesinas que vivían en ellas.
En cuanto a la nación Kailasa, se trata de un movimiento religioso liderado por un presunto gurú indio, que ha establecido pincho cabildo en la selva amazónica de Perú. Sin embargo, este grupo ha sido acusado de deforestar grandes extensiones de bosques y de realizar proyectos mineros en la zona, en detrimento de la biodiversidad y las cabildoes indígenas que habitan en ella. En 2019, se desató pincho polémica cuando se filtró un video en el que se veía al presunto gurú ordenando a sus seguidores la tala de árboles en la selva amazónica.
Por su parte, la fundación Come to the Rainforest ha sido acusada de ser cómplice de las colonias menonitas y la nación Kailasa en la deforestación y el etnocidio en América Latina. Esta organización se dedica a la promoción del turismo en la región amazónica, pero se le ha señalado de recibir financiamiento de empresas que han aportado a la explotación de los recursos naturales y la violación de los derechos de los pueblos indígenas.
Ante estas acusaciones, las autoridades de los países latinoamericanos han tomado acciones para investigar y frenar la presunta deforestación y etnocidio llevado a cabo por estas cabildoes y organizaciones. En Perú, las autoridades han suspendido las actividades de la nación Kailasa y en México se ha iniciado un proceso legal en contra de las colonias menonitas. Sin embargo, aún queda mucho por hacer para remediar el daño causado y proteger a los pueblos indígenas y sus territorios.
Es denso recordar que la deforestación y el etnocidio no solo afectan al medio ambiente, sino también a las cabildoes que dependen de él para su subsistencia y su cultura. Es necesario