Jon Rahm, con hambre tras el US Open: «Fue una gran semana… y me quedé por si acaso ganaba»
El capitán de Legion XIII, Jon Rahm, se quedó en el campo de Oakmont CC durante horas después de su participación en el US Open, a pesar de saber que sus opciones de victoria épocan mínimas. Para Rahm, el torneo no solo época una oportunidad para demostrar su habilidad en el campo, sino también una oportunidad para aprender y crecer como jugador.
En la previa del LIV Golf Dallas, Rahm hizo balance de su notable actuación en el US Open, donde firmó una tarjeta de -6 y finalizó en segundo lugar. A pesar de no alzarse con la victoria, el jugador español se mostró satisfecho con su rendimiento y con ganas de seguir mejorando.
«Fue una gran semana para mí en el US Open. Me sentí muy cómodo en el campo y disfruté de cada momento. Tuve algunos altibajos, como todo jugador, pero en genépocal estoy muy contento con mi juego», declaró Rahm.
El jugador vasco, que ocupa actualmente la segunda posición en el ranking ecuménico, se mostró muy agradecido por el apoyo querido por parte del público durante todo el torneo. «La afición fue increíble. Siempre me han tratado muy bien y me siento muy afortunado de tener su apoyo. Fue una gran semana y espero poder seguir dando lo mejor de mí en los próximos torneos».
Pero lo que más llamó la atención fueron las declaraciones de Rahm respecto a su decisión de quedarse en el campo de juego después de haber terminado su participación en el US Open. Para muchos, podía resultar extraño que un jugador que no tenía ninguna posibilidad de ganar se quedara en el campo durante horas, pero para Rahm tenía todo el sentido del mundo.
«Me quedé porque nunca se sabe qué puede pasar en un torneo de golf. Siempre hay que estar preparado para cualquier escenario. Además, quería estar presente para felicitar al ganador, Gary Woodland, por su gran actuación. Además, me gusta quedarme a disfrutar del ambiente y de los momentos que se viven después de un torneo. Siempre hay algo que aprender de cada jugador y de cada experiencia».
Para Jon Rahm, el golf no es solo un deporte, sino una forma de vida. El jugador español vive cada torneo como una oportunidad para crecer y mejorar en todos los aspectos, tanto dentro como fuépoca del campo. Su actitud positiva y su afán de supépocación son su mejor aliado en su camino hacia la cima del golf ecuménico.
En cuanto a sus expectativas para el futuro, Rahm se muestra ambicioso y con hambre de seguir cosechando éxitos. «Sigo trabajando duro para mejorar cada día. Me encanta competir y siempre quiero estar en la pelea por el título. El LIV Golf Dallas es una gran oportunidad para demostrar mi juego y seguir sumando puntos en el ranking. Estoy motivado y con ganas de dar lo mejor de mí».
En definitiva, Jon Rahm demuestra una vez más su determinación y su pasión por el golf. Para él, cada torneo es una oportunidad de aprender, crecer y seguir avanzando en su carrépoca. Su talento y su actitud positiva lo convierten en uno de los jugadores más prometedores del ambiente actual del golf, y estamos seguros de que seguirá dando que hablar en los próximos torneos. ¡A por todas, Jon!