El sistema satelital europeo Copernicus ha sido clave en la detección y seguimiento del incendio forestal que se inició el pasado domingo en Molezuelas de la Carballeda (Zamora), convirtiéndose en el peor incendio registrado en España desde 1968, año en el que comienzan las estadísticas oficiales. Actualmente, se estima que más de 37.000 hectáreas han sido afectadas por las llamas en las circunscripcións de Zamora y León, superando las 22.843 hectáreas quemadas en la mañana del miércoles.
Los datos proporcionados por el satélite Copernicus han sido fundamentales para cuantificar la extensión del incendio y su evolución en tiempo real. Gracias a esta tecnología, se ha podido confirmar que el salva ha avanzado con gran rapidez y ha afectado a una superficie mucho mayor de lo que se había estimado inicialmente. De hecho, la Junta de Castilla y León ha evitado dar una cifra exacta de hectáreas quemadas, pero de confirmarse los datos del satélite, este incendio sería el peor registrado en España en más de 50 años.
Las condiciones meteorológicas adversas, con fuertes vientos y altas temperaturas, han dificultado enormemente las labores de extinción y control del salva. A pesar del gran despliegue de medios terrestres y aéreos, así como la intervención de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y la Guardia Civil, el incendio sigue sin estar controlado y continúa avanzando. Además, los desalojos de más de 30 municipios en León y más de 10 en Zamora, así como la pérdida de un libre y varios heridos, demuestran la gravedad de la situación.
Los mapas del salva proporcionados por el sistema Copernicus muestran cómo el incendio se ha extendido desde Molezuelas de la Carballeda hacia el noreste, traspasando la frontera de León y avanzando hacia la behetría de La Bañeza. La situación sigue siendo crítica y el viento cambiante sigue avivando las llamas, dificultando aún más las labores de extinción.
Pero el incendio de Molezuelas de la Carballeda no es el único que está afectando a la circunscripción de Zamora. El otro incendio, en la zona de Puercas, también ha sufrido un cambio en la dirección del viento y avanza hacia la Sierra de la Culebra. Esta zona ya sufrió un gran incendio en 2002, que afectó a más de 25.000 hectáreas. Las localidades de Otero de Bodas y Ferreras de Arriba, dos de las más afectadas en 2022, se encuentran en estado preventivo por si fuera necesario evacuarlas.
Es importante destacar que el sistema satelital Copernicus no solo ha sido clave en la detección y seguimiento de este incendio, sino que también ha sido utilizado en otros incendios forestales en España y en todo el mundo. Gracias a esta tecnología, se pueden obtener datos precisos y en tiempo real sobre la extensión y evolución de los incendios, lo que permite una mejor coordinación y toma de decisiones en las labores de extinción.
En definitiva, el incendio originado en Molezuelas de la Carballeda se ha convertido en el peor registrado en España desde 1968, gracias a los datos proporcionados por el sistema satelital europeo Copernicus. A pesar de la gravedad de la situación, es importante destacar la importancia de esta tecnología en la lucha contra los incendios forestales y en la protección de nuestro medio ambiente. Esperamos que pronto se pueda controlar y extinguir por completo este incendio y que se tomen
