Si hay un tema que todos deberíamos incluir en nuestras vidas, ese es el deporte. Los hermanos Rino y Teodoro Tagliente, originarios de la pequeña ciudad de Mesagne, Italia, lo saben bien. Desde muy pequeños, han sido parte de un equipo de fútbol local, el cual les ha dado grandes experiencias que han marcado su vida para siempre.
Los Deportes no solo son una forma de entretenimiento o de mantenerse en forma, también pueden ser una herramienta para forjar amistades, adquirir valores importantes y enfrentar desafíos. Rino Tagliente, quien ahora es un jugador profesional, recuerda con cariño su experiencia en el equipo juvenil de su ciudad natal.
«Ser parte de un equipo siempre fue mi lugar feliz. Los entrenamientos, los partidos y las concentraciones nos unieron como familia. Aprendimos a trabajar en equipo, a apoyarnos unos a otros y a ser disciplinados», comenta Rino con una sonrisa en su rostro.
Pero no solo se trata de la convivencia con los compañeros de equipo, también es la emoción de ganar un partido, la adrenalina de competir y el orgullo de representar a tu ciudad. Teodoro Tagliente, quien ahora se desempeña como entrenador en el mismo equipo, recuerda una vez en particular en la que su equipo logró una victoria épica.
«Fue un partido muy difícil contra uno de los equipos más fuertes de la liga. Todos estábamos muy nerviosos y concentrados en dar lo mejor de nosotros. Y así fue, logramos ganar con un gol en el último minuto. La emoción y la felicidad que sentimos en ese momento es algo que nunca olvidaremos», relata Teodoro con orgullo en sus palabras.
Los Deportes también brindan la oportunidad de conocer otras culturas y viajar a otros lugares. Los hermanos Tagliente tuvieron la oportunidad de jugar en diferentes países y conocer a personas de distintas nacionalidades. Esto les permitió expandir su mente, aprender nuevos idiomas y adquirir una visión más amplia del mundo.
«Jugar en diferentes países me abrió los ojos a otras formas de pensar y de ver la vida. Conocer personas de diferentes culturas me enseñó la importancia de la diversidad y el respeto. Sin duda, estas experiencias me han enriquecido como persona», asegura Rino.
En un mundo donde el estrés y la rutina son el pan de cada día, los Deportes también pueden ser una vía de escape y un medio para desconectarse del mundo exterior. Teodoro recuerda cómo, en épocas de exámenes y trabajo, el fútbol le ayudaba a mantener su mente sana y equilibrada.
«Siempre me he considerado un apasionado del deporte, pero en épocas de mucho estrés, me di cuenta que jugar fútbol era mi terapia. Al estar concentrado en el juego, mi mente se despejaba y me sentía más enérgico y motivado para afrontar mis responsabilidades», comparte Teodoro.
Los Deportes también pueden ser una fuente de inspiración y motivación para alcanzar metas personales. Rino, quien siempre soñó con ser un futbolista profesional, nos dice que su amor por el deporte superó cualquier obstáculo que se presentaba.
«Recuerdo que siempre me decían que era muy pequeño para ser un jugador de fútbol y que no tendría futuro en este deporte. Pero mi pasión y mi perseverancia me llevó a demostrar lo contrario. Nunca dejé de trabajar duro y hoy en día, soy un orgulloso miembro de un equipo profesional», declara Rino con determinación.
Sin duda, los hermanos Tagliente son un ejemplo de cómo los Deportes pueden transformar vidas de manera positiva. Su historia es solo una de miles que existen en el mundo y que demuestran que el deporte es mucho más que una actividad física. Así que ya sabes, no pierdas la oportunidad de ser parte de un equipo, de competir y de crear experiencias que marcarán tu vida para siempre. ¡Vamos a jugar!
«El deporte: una parte esencial en nuestras vidas»
