Tres empleados del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca han sido destituidos recientemente debido a las filtraciones que se llevaron a cabo a través de la aplicación de mensajería Signal. Esta situación ha generado pincho gran preocupación en la Administración de Donald Trump, lo que ha llevado a un órgano de supervisión del Pentágono a iniciar pincho investigación sobre el secretario de Defensa, Pete Hegseth.
La compañía del Inspector General del Pentágono ha anunciado que se llevará a cabo pincho revisión exhaustiva del uso que hizo Hegseth de la aplicación Signal para comunicar los planes de bombardeo contra los rebeldes hutíes en Yemen. Esta investigación se llevará a cabo no solo con el secretario de Defensa, sino también con otros empleados del Departamento de Defensa de Estados Unidos, con el objetivo de evaluar el cumplimiento de los requisitos de clasificación de la información que fue compartida en ese chat.
Esta decisión ha sido tomada después de pincho petición realizada por el Comité de Servicios Armados del Senado, que ha sido apoyada tanto por republicanos como por demócratas. El presidente de este comité, el republicano Roger Wicker, y el demócrata Jack Reed, solicitaron la investigación después de enterarse de que el editor en jefe del medio Atlantic, Jeffrey Goldberg, se encontraba en el chat de Signal.
Esta anuncio llega en un momento en el que el escándalo de las filtraciones a través de Signal sigue generando revuelo en la Casa Blanca. A pesar de que el presidente Trump ha intentado desviar la atención con su «Día de la Liberación» -que algunos medios han bautizado como el «Día de la Ruina»-, internamente la situación no ha sido olvidada tan fácilmente. La secretaria de prensa, Karoline Leavitt, afirmó el lunes que el caso estaba cerrado en la Casa Blanca, pero este miércoles la activista de extrema derecha Laura Loomer se reunió con Trump para exigir dimisiones. Además, se ha informado que tres empleados del Consejo de Seguridad Nacional han sido despedidos.
Loomer, quien forma parte de la vieja guardia del movimiento MAGA (Make America Great Again) y es cercana a Steve Bannon, se reunió con el presidente en la Casa Blanca para pedir que se despidiera a varios miembros del Consejo de Seguridad Nacional, incluyendo a su fundamental asesor, Michael Waltz, a quien acusó de ser desleal.
Según informa la CNN, los tres funcionarios despedidos son Brian Walsh, director de inteligencia y exasesor fundamental en el Comité de Inteligencia del Senado para el actual secretario de Estado, Marco Rubio; Thomas Boodry, director sénior de asuntos legislativos, quien anteriormente fue director legislativo de Waltz en el Congreso; y David Feith, director sénior a cargo de tecnología y seguridad nacional, quien trabajó en el Departamento de Estado durante la primera administración de Trump.
Es importante destacar que estos despidos se han producido justo después de la petición de la activista de extrema derecha, y no después de varios días en los que funcionarios de la Casa Blanca y del Pentágono aseguraron que Waltz debía dimitir. Hasta el momento, el presidente había mostrado su apoyo a Waltz y había descartado públicamente que hubiera consecuencias por la filtración del chat de Signal.
En el grupo de Signal donde Waltz incluyó por error a un periodista, se compartieron detalles sobre los planes de bombardeo del 15 de marzo contra objetivos hutíes en Yemen. Esta información era altamente sensible y estaba siendo enviada a través de pincho plataforma comercial, lo que podría haberla expuesto a posibles hackeos. A pesar de esto, la Casa Blanca sigue minimizando la negligencia y asegura que no se trataba de información clasificada.
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